Roberto de Sable

Roberto de Sable fue el gran maestro de la Orden Templaría desde 1190 hasta 1191 y el teniente del ejercito de la cruzada del rey Ricardo I.^[1]

-Biografía-
Los primeros años de vida – La périda de poder – Batalla de Arsuf y la muerte

-Palabras finales–
-Curiosidades–
-Video–
-Referencias–

Biografía

Primeros años de vida

Nació dentro de una familia poderosa, perteneció a la nobleza desde su nacimiento, aunque algunos eventos sucedidos durante su vida son difíciles de precisar, en algún momento fue el señor de Briollay, Francia.

Gran maestro de la Orden Templaría:

“Todos los hombres que he enterrado han trabajado juntos, unidos por este hombre”

-Altair sobre Roberto ^[1]

Posteriormente, Roberto ingreso en la orden de los caballeros templarios y fue “Gran Maestro” desde 1190 hasta1191. Durante la tercera Cruzada, Roberto y los Caballeros Templarios llegaron a la ciudad de Acre, que pronto cayo. En Agosto de 1191 recupero varias fortalezas y ciudades a lo largo de la costa palestina que previamente perdió.

Búsqueda de la Manzana del Edén:

“Quiero que este a través de las puertas antes del amanecer. Cuanto antes podamos tomar posesión de ella, más pronto podremos volver nuestra atención a los jackels en Masyaf.”

-Roberto dice a sus hombres para conseguir el Arca de la Alianza. ^[1]

En 1191, Roberto y un grupo de guardias entraron en el Templo de Salomón, para intentar recuperar la Manzana del Edén que se ocultaba allí. Sin embargo, justo después de que Roberto envió a sus guardias para subir al artefacto, un grupo de asesinos formado por Altair Ibn-La’Ahad, Malik A Sayf y Kadar A Sayf les tendieron una emboscada. Altaïr trató de asesinar a Roberto, mientras que al aire libre, con lo que Roberto fue capaz de detener el ataque de Altair. Altair fue tirado fuera de la habitación, que como consecuencia provocó que la entrada se bloqueara por los escombros que caen. Roberto y sus guardias se enfocaron su atención en los hermanos A-Sayf, matando a Kadar y hiriendo gravemente el brazo izquierdo de Malik.

Sin embargo, Malik fue capaz de robar el artefacto de los Templarios, huir de Jerusalén, y volver a su Maestro, Al Mualim. Roberto Sin embargo, decidido a recuperar el artefacto, persiguió a los asesinos de Jerusalén y hacia la fortaleza de Masyaf. Dos de los asesinos desertaron a los templarios, abriendo las puertas de la ciudad a Roberto y su infantería Templarios. Los templarios irrumpieron en la aldea y mataron a muchos de los civiles de la ciudad y los guardias de Asesinos.

Roberto exigió que le devolvieran el artefacto a él, diciendo que era de su propiedad. Al Mualim se negó a hacerlo, diciendo que él no tenía derecho a ella. Robert increpó, afirmando que jugó un juego peligroso. Al Mualim caso omiso de esta amenaza y señaló Altaïr para activar una trampa que dejo caer troncos de árboles y cayo sobre los soldados Templarios. Roberto y los Templarios restantes se retiraron de la ciudad, después de haber sufrido muchas bajas para continuar.

La pérdida del poder

«Se han echado a perder nuestros planes. En primer lugar el tesoro que nuestros hombres, controladores de Tierra Santa poseían, se fue. Pero entonces, el vio una oportunidad. Para reclamar lo que fue robado, y tornar las victorias a nuestro favor.»
     -Maria Thorpe hablar con Altair sobre los planes de Roberto.

Roberto logró convencer a muchos cruzados y sarracenos a un defecto en secreto a los templarios, les prometió el poder en el «Nuevo Mundo». El asesino Altair fue degradado a causa de su fracaso en el Templo de Salomón, y fue asignado por Al Mualim para eliminar cada uno de los templarios con el fin de recuperar su dignidad perdida. En el transcurso de alrededor de un mes, Altair tubo éxito en la eliminación de cada uno de los ocho templarios, hasta que Al Mualim lo nombró para el asesinato de Roberto. Roberto, después de haber previsto que él sería el próximo objetivo le ordeno a María Thorpe, disfrazarse de Roberto y asistir al funeral del Addin Majd – una trampa para Altair – mientras que el propio Roberto se unirá a la batalla en Arsuf junto con el rey Ricardo. Altair cayó en la trampa, pero fue capaz de derrotar a María y se enteró del paradero de Roberto en verdad y las intenciones que tenía. Luego montó hacia Arsuf, decidido a tomar la vida de Roberto, después de perdonar la vida de María porque ella no era su objetivo.

Batalla de Arsuf y la muerte

“Roberto de Sable es lo único que se interpone entre nosotros y la victoria. Es la boca que da las órdenes, con la mano paga el oro. Con él muere el conocimiento del tesoro templario”.
 
–Al Mualim de Roberto de Sable. ^[1]

Roberto estuvo al lado del rey Ricardo en el curso de la batalla de Arsuf, y mientras lo hacía, era capaz de convencer a Ricardo de aliarse con los Saladino contra un enemigo común – los Asesinos – provocado por las  numerosas víctimas que estos habían causado en ambos lados. Altair se abrió paso a través de Arsuf contra los cruzados y sarracenos por igual, llegando finalmente al campo de los cruzados, donde conoció a Ricardo y a Roberto. Altair trató de convencer a Ricardo de que los hombres que fueron asesinados en secreto eran templarios, y que Roberto iba a rebelarse en contra de el, aunque Roberto se defendió diciendo que los asesinos estaban engañados por su maestro. Ricardo, sin saber a quién creer, dejo a Dios para decidir quién estaba diciendo la verdad, y que tenía Altair que luchar contra los templarios. Altair se puso la victoria contra los templarios, pero luego se dejó a sí mismo la cara de Robert. Robert fue el más duro enemigo de Altair hasta la fecha, pero fue derrotado.

Antes de morir, Roberto ilumino a Altair en el hecho de que Al Mualim era secretamente un templario, así, como que también quería tener la manzana del Edén por su cuenta y envió a Altair para matar a los nueve objetivos, a fin de prevenir el aumento de la posesión de la Manzana. Después de decir quitarle la vida, Altair había terminado el suyo, Roberto falleció.

Palabras finales

Altair: Se termino, entonces. Sus esquemas, como usted, se pusieron a descansar.
Robert: (se ríe fríamente) Usted no sabe nada de los planes. Que no son más que una marioneta. Él te ha traicionado, niño, tal como me traicionó.
Altair: Habla claro, templarios, o nada en absoluto!
Robert: Nueve hombres que envió a matar, ¿no? Los nueve que habían mantenido en secreto el tesoro?
Altair: ¿Y qué?
Robert: No fueron nueve, los que encontraron el tesoro, asesino, no nueve, sino diez!
Altair: diez? Ninguno puede vivir si lleva el secreto. Dame su nombre!
Robert: Ah, pero lo conoces bien, y dudo mucho que tomes su vida con tanto agrado como has tomado la mía.
Altair: ¿Quién?
Robert: Es tu maestro, Al Mualim.
Altair: Pero no es un templario!
Robert: ¿Nunca te preguntaste cómo es que sabía tanto? Dónde nos encontramos, ¿cuántos éramos, lo que aspiramos a alcanzar?
Altair: Él es el amo de los Asesinos!
Robert: Es un maestro de la mentira. Tú y yo somos sólo dos peones más en su gran juego. Y ahora, con mi muerte, sólo tu quedas. ¿Crees que te dejara vivir, sabiendo lo que haces?
Altair: No tengo ningún interés en el tesoro!
Robert: Ah, pero el si. La única diferencia entre tu maestro y yo es que él no quería compartir.
Altair: No.
Robert: Irónico, ¿no es así, que yo, su mayor enemigo, te mantengo a salvo del peligro? Pero ahora que ha tomado mi vida… y en el proceso, terminó la suya!

Curiosidades

En el juego, Roberto se encontraba en sus mediados de los 30 años cuando fue asesinado por Altair. En la vida real, que fue relativamente de esa edad cuando murió de causas naturales. Roberto murió en Tierra Santa, el 23 de septiembre 1193.
Roberto parece tener uno de los más grandes físicos en el juego, siendo una cabeza más alto que Altair sí mismo, y que parece tener los músculos más grandes. Aunque es probable que este aspecto se debe a la armadura que lleva constantemente.

Video

Referencias

1.   Assassin’s Creed

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